lunes, octubre 17, 2011

A $5.000 el tinto (sobre la gasolina)


Originalmente publicado en   
Editorial de la revista online www.demotos.com.co 

En verdad suena grotesco pagar cinco mil pesos por un tinto, de hecho en cualquier parte del país sería motivo de revuelta, pero en Tokio o en París es un valor normal, ya que ellos no tienen cafetales como los nuestros. También sería absurdo que nos cobraran $4.000 por un banano, pero en Islandia darse ese gusto con el cereal de la mañana puede costar incluso más. 



Cuando llenamos nuestros tanques en una estación de gasolina y pagamos $8.500 por cada galón de corriente, es como si estuviéramos comprando bananos a precio de Islandia o tomándonos un tinto con café sembrado en Tokio, no hay ninguna diferencia. A nuestro gobierno le resulta muy normal cobrarnos la gasolina a precio internacional, a sabiendas de que se trata de un producto local, que se extrae y se refina dentro del país a un costo muchísimo más bajo de lo que implicaría importarlo.  

La realidad es que en Colombia el combustible se convirtió desde hace mucho tiempo en una mina de oro para el gobierno y para Ecopetrol, no solo por los millones de barriles que se exportan cada año, sino por las exageradas utilidades e impuestos que nos cobran en cada gota que compramos. Solo los que viven en zonas limítrofes con Venezuela tienen derecho a precios realistas y no porque el gobierno así lo quiera, sino porque de otra forma no podrían hacer nada frente al contrabando de gasolina, que en el país vecino tiene un valor simbólico por no decir que la regalan, ya rayando en el extremo opuesto, aquí nos asaltan de frente y allá la usan para mantener al pueblo contento.

Aunque pareciera que soplan vientos de cambio, o tal vez seremos demasiado optimistas, pero hemos visto que cada vez este es un tema que se toca con mayor frecuencia en los medios, destapando las verdaderas cifras, no las del Ministro Rodado que nunca convencen, y se va haciendo cada vez más claro para todos los colombianos que si las cosas fueran correctas y las ganancias y los impuestos estuvieran cifrados en porcentajes justos, no deberíamos pagar más de cinco mil pesos por el galón de corriente, todavía dejando un buen margen para la nación y para la poco eficiente maquinaria de Ecopetrol.



Gracias a un artículo de Juan Gossaín, publicado por El Tiempo, ya está claro que un galón de gasolina le cuesta a Ecopetrol, con impuestos incluidos, $3.320 y de ahí a los $8.500 que nosotros pagamos hay una inmensa distancia, por eso no es extraño que la petrolera, con todo y sus obsoletas refinerías, haya divulgado recientemente, con bombos y platillos, utilidades récord del 74,8% en el primer semestre del presente año, cifras impensables para cualquier negocio o empresa que se dedique a una actividad lícita.

Finalmente todos engordamos las ganancias de Ecopetrol, independientemente de que tengamos o no vehículo propio, la gasolina es un producto que afecta el valor de todo lo que compramos, más con una infraestructura vial tan atrasada que dispara por las nubes los costos de todo lo que se mueva por carretera, que en Colombia es prácticamente todo, porque tantas ganancias y tantos impuestos que nos cobran no han servido ni siquiera para que tengamos un sistema férreo, transporte fluvial o como mínimo verdaderas autopistas en las que rinda la gasolina. De momento será dar gracias por que todavía podemos gozar de un tinto a precio local y rezar para que la cafeína logre algún día despertarnos del letargo en que vivimos y exijamos lo que es justo.



Afortunadamente todavía nos podemos sentar en una estación de gasolina y disfrutar
de un café colombiano a precio local, porque el combustible, también nacional, lo
pagamos como si fuera importado.

El Director
demotos@demotos.com.co Twitter: @juandemotos